Durante una emboscada perpetrada por el Estado Islámico al norte de Burkina Faso contra un convoy militar, murieron más de 70 soldados, decenas resultaron heridos y cinco fueron tomados como rehenes.

En un comunicado que difundió el viernes Amaq (brazo informativo de ISIS (siglas para referirse al grupo extremista), dijo que los milicianos atacaron un convoy que intentaba introducirse a áreas que controla cerca de la localidad de Deou, en la provincia Oudalan del Sahel. Señalaron que incautaron armas y persiguió a los soldados en retirada por el desierto.

Las imágenes que difundió el grupo muestran a 54 cuerpos asesinados en uniforme militar tendidos sobre la tierra manchada de sangre, al igual que más de 50 fusiles de asalto incautados e imágenes de los cinco soldados que dijeron fueron tomados prisioneros.

El anuncio lo hicieron una semana después del ataque en Deou y días después de otro ataque en el poblado de Tin-Akoff, donde los locales y grupos de la sociedad civil señalan que decenas de soldados y civiles adicionales fueron asesinados cuando fue atacado un puesto militar.

Hasta ahora se desconoce el número de personas asesinadas en los dos ataques. La semana pasada el gobierno confirmó que 51 soldados murieron en la embocada en Deou, pero no ha respondido solicitudes para que actualice la cifra de víctimas, ni8 ha comentado sobre la agregión contra Tin-Akoff.

Cabe señalar que esta ha sido la emboscada más letal contra soldados desde que el nuevo líder de la junta, el capitán Ibrahim Traore, tomó el poder en septiembre y los analistas dicen que podría amenazar su control.

Fuente: AP / Foto: Archivo / JAC