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CIUDAD DE MÉXICO.

El proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2021 contempla un gasto total programable de 4 billones 618.3 mil millones de pesos, un incremento de 1.3% respecto a lo aprobado en 2020; con recursos enfocados principalmente para los rubros de salud, inversión física y programas sociales.

“Para 2021 se estima que el gasto neto total pagado sume 6 billones 257.1 mil millones de pesos, mientras el gasto programable pagado asciende a 4.6 billones de pesos. En su conjunto, el gasto programable –que concentra acciones del gobierno para potenciar el desarrollo de largo plazo de nuestro país– aumenta 1.3% en términos reales respecto al gasto aprobado en 2020”, se detalló.

Para el rubro de gasto no programable, integrado por el costo financiero de la deuda pública, las participaciones a estados y municipios que prevé la Ley de Coordinación Fiscal, y el pago de adeudos de ejercicios fiscales anteriores, suma 1.67 billones de pesos en el proyecto de Presupuesto de Egresos para 2021.

Por rubros, se plantea un aumento de 9.1% en el ramo de salud y de 5.0% para el IMSS e ISSSTE en conjunto, así como robustecer los programas para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores y de las Personas con Discapacidad.

“Antes de la crisis de covid-19 el sistema de salud tenía muchas deficiencias de capacidades técnicas y operativas, ahora vamos a empezar a fortalecerlo desde una base muy alta”, comentó Arturo Herrera, titular de Hacienda.

El gasto de inversión se incrementaría en 5.3% en términos reales, con una asignación de 829.4 mil millones de pesos, con el objetivo de potenciar la inversión en infraestructura para apoyar el rápido restablecimiento de la economía en el corto plazo y con el fin de mejorar la conectividad interna y con el exterior de México.

Se busca asegurar la continuidad y asequibilidad de los recursos energéticos que continuarán siendo el principal motor de la economía global por décadas; e impulsar en general el desarrollo de largo plazo, particularmente el de la región Sur-Sureste. “Estas actividades generan empleo y dinamizan la economía”, dijo Herrera.

Por otro lado, casi 30% del gasto irá dirigido a estados y municipios, 1.8 billones de pesos; el equivalente a más de 50% de la recaudación federal participable.

UN PRESUPUESTO SANITIZADO…

Herrera advierte que no hay margen de maniobra; Sauri le recuerda que eso lo deciden los diputados.

“Aquí se habla con cubrebocas… ¿O me lo puedo quitar?”, preguntó el secretario de Hacienda, Arturo Herrera Gutiérrez, dirigiéndose a la presidenta de la Cámara de Diputados, Dulce María Sauri Riancho, quien de inmediato le regaló un gesto de anuencia a la petición del funcionario.

En el Salón Verde de San Lázaro, con las medidas de la nueva normalidad parlamentaria, a los legisladores les fue difícil renunciar a ese ritual de aprovechar la entrega del Paquete Económico para hacer buenas migas y muchas fotos con el funcionario del que depende el siempre escaso pastel de los recursos.

Para dejar registro de los tiempos covid, Herrera aclaró que esta vez prescindiríamos de los CD que antes contenían el Proyecto de Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos y que ahora todo tendrá que revisarse en internet.

Pero el secretario también dejó ahí una elegante advertencia que en términos legislativos significa que no tendrán chance de meterle mano al proyecto gubernamental.

“La actual crisis económica no permite grandes márgenes de maniobra en las finanzas públicas, pero también estamos muy conscientes de que no hay presupuesto perfecto. Nosotros apostamos siempre a mantener un diálogo constructivo con el Congreso de la Unión, y mi equipo ha recibido instrucciones para ayudarlos con los cálculos y proveer de información, si así lo requieren ustedes, en el proceso legislativo”.

Con la misma elegancia, la presidenta de los diputados le recordó al titular de Hacienda que el cómo y el cuánto y el quiénes del Presupuesto es una atribución de los diputados que, detalló, durante septiembre tienen dos tareas fundamentales: analizar el informe presidencial y revisar y resolver, a partir de ahora, la propuesta de ingresos del Presidente de la República para el próximo año.

La priista Sauri Riancho puntualizó que serán 10 semanas las que tendrán en San Lázaro para  definir montos y destinatarios del Presupuesto del 2021. “Hoy más que nunca la aprobación del Paquete Económico debe brindar estabilidad y certeza al pueblo de México”, sostuvo la exgobernadora de Yucatán.

Citando las declaraciones que el funcionario le hizo a los diputados de Morena a finales de agosto, la expresidenta del PRI enumeró que “todos los guardaditos, en sus propias palabras, secretario, han sido utilizados este año: Fondo de Estabilización de Ingresos Presupuestales de los Estados y del Petróleo; fidecomisos que no requieren reforma de ley para disponer de sus recursos, etcétera; los ahorros nacionales de varios lustros se han empleado para atender la emergencia”.

Pero no sólo entonces, con los legisladores del partido en el gobierno, el secretario Herrera fue sincero. Ayer también, más allá de las cifras optimistas, encadenó las futuras buenas noticias económicas al control de los contagios: “No hay disyuntiva entre economía y salud: la economía sólo podrá crecer de manera sostenida si mantenemos contenida la pandemia”.

Fue el mensaje de un funcionario que sabe que el virus sigue aquí, poniendo en riesgo la recuperación y el crecimiento. Un virus que se cuela hasta en los chascarrillos de los secretarios que, como él, ya lo padecieron y lo sortearon:

“Está sanitizado y yo ya no lo toqué”, dijo Arturo Herrera al entregarle a la diputada Dulce María Sauri Riancho el paquete del Presupuesto covid.

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