Publicado en Destacado, NACIONAL.

En las cuatro colonias sucedieron las tragedias infantiles. Vecinos demandan estrategias y recorridos permanentes de la Policía Municipal para prevenir hechos delictivos.

​“Después de la tragedia (del niño raptado y asesinado) sí hubieron recorridos de la policía, pero no por mucho tiempo, la verdad aquí se respira la inseguridad”, es el reproche de los vecinos de la colonia Aviación en las calles Framboyanes, 5 de Mayo, 15 de Mayo, Cuauhtémoc, entre otras, donde sufren los estragos de la inseguridad en carne propia.

Pese a encontrarse relativamente cerca de la base de Seguridad Pública del Estado (SSP), no hay recorridos frecuentes por parte de ninguna corporación como la Municipal e incluso del Ejército, de acuerdo al testimonio de quienes habitan la colonia.

Tras la tragedia ocurrida a finales de marzo, donde un menor de edad pereció en manos de un violento sujeto quien abusó de él y no conforme con eso, terminó por asesinarlo cruelmente para luego abandonar su cuerpo en solitario callejón de la colonia, los lugareños afirman que ahí se respira el miedo.

Lo anterior, luego de que afirmaron que en este sector los hechos delictivos se dan de manera constante, ya sea en un ‘pequeño’ robo discreto hasta asaltos violentos e incluso muertes que han impactado a la sociedad como los ocurridos en fechas recientes.

“La muerte del pequeño la verdad fue algo que conmovió a la ciudadanía, no lo esperábamos, soy madre de familia y me siento mal porque yo miraba al niño, lo conocía y la verdad sí me afectó. Lo que es aquí en la colonia no hay seguridad, no se sabe con quién estás hablando, no hay recorridos y es muy raro que pase la policía, vienen cuando quieren, mientras no, lo hacen a su manera, no cuando se les requiere. Aquí hay temor. Duran más los velorios que los recorridos de la policía”, afirmó una vecina con obvio miedo en sus palabras.

Los niños entre balas e inseguridad

Como se recordará, los casos de violencia al menos contra menores que han impactado a la ciudadanía sucedieron en colonias aledañas, no tan alejadas unas de otras como lo son la Carmen Romano, donde a finales del 2016 Lucía Hernández Isidro de 28 años de edad y su hija de tan solo ocho años fueron ultimadas por armas de grueso calibre en un brutal ataque contra su domicilio al amparo de la noche.

Entre los casos más recientes se encuentran los que marcaron el inicio de año el 24 de febrero, donde un par de niñas de 6 y 10 años perecieron ahogadas, ambas vecinas de la colonia Aviación así como el pequeño Sergio, quien murió violentamente a manos de un sujeto ya detenido el pasado 27 de marzo.

El último de los eventos que traumatizó a la sociedad fue el de Eduardo, de tan solo 10 años de edad, quien murió de 2 balazos en la calle Belisario Domínguez, en la colonia Barrio de Las Flores. Sin embargo, todos los casos de estos menores tienen una constante y es que todos eran estudiantes de la escuela Juan Escutia de este municipio.

Exigen más seguridad

La constante es la misma, las amas de casa, los señores del hogar temen siquiera opinar pues ‘no les vaya a tocar por decir algo que no es’, mejor optan por saludar y con un gesto amable se refugian en sus hogares desde donde observan a lo lejos, aunque la petición es la misma: “más vigilancia policial y menos condolencias”.

“Como vecina me siento molesta, cómo va a ser posible tanta maldad contra un niño, ser capaz de tantísimas porquerías y ensañarse contra un niño que no tenía nada que ver. Aquí hay inseguridad aunque no se quiera creer, la justicia no está de nuestra parte, a veces se le da más razón a los asesinos y malhechores que al ciudadano, por ejemplo, aquí pasan los policías pero nunca están aquí, vienen cuando quieren y no cuando se les requieren” afirmó Laura Jiménez Pavón.

Asimismo, exigieron dejar las simulaciones para de verdad realizar recorridos en estas colonias conflictivas ya que solo cuando ocurre una tragedia se activan protocolos cuando su función debería ser la de prevenir el delito, no solo acordonar un área cuando ya ocurrió una desgracia.

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