Las voces que alertan de una catástrofe humanitaria en caso de una ofensiva del régimen sirio contra la provincia de Idlib, el último gran bastión opositor, aumentan a falta de dos días para una importante reunión sobre Siria en Irán en la que participarán Rusia y Turquía.
Organizaciones como Amnistía Internacional (AI) y la Oficina de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA), o el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, advirtieron de los peligros de una acción militar contra Idlib, región en el noroeste de Siria donde viven cerca de tres millones de personas.
AI advirtió de que la vida de dos millones de civiles dependerá del resultado de la cumbre de Teherán y alertó de que la situación humanitaria en Idlib es muy delicada de por sí, puesto que la región acoge a unas 700,000 personas desplazadas de otras regiones de Siria y que “no pueden soportar las consecuencias de otra ofensiva”.
“Las vidas de millones de personas en Idlib están ahora en manos de Rusia, Turquía e Irán (…). Tienen el poder de garantizar que los civiles estén protegidos de los incesantes ataques ilegales que han caracterizado gran parte de este brutal conflicto”, afirmó en un comunicado la directora de campañas para Oriente Medio, Samah Hadid.
La OCHA, avisó en un mensaje en Twitter de que la ayuda humanitaria para los desplazados de Idlib podría colapsar por “la falta de fondos y por la inseguridad” en la zona en caso de una ofensiva.
Deja una respuesta